lunes, 23 de marzo de 2009

El Consistorio adapta las farolas de la ciudad ante la nueva norma

SALAMANCA

Ley de Prevención de la Contaminación Lumínica. El texto cumple un periodo de información pública.

El Ayuntamiento ha adaptado el entorno urbano ante la inminente aplicación de la Ley de Prevención de la Contaminación Lumínica y del Fomento del Ahorro y de la Eficiencia Energéticos derivados de Instalaciones de Iluminación (en periodo de información pública en el Boletín Oficial de Castilla y León), de tal manera que las medidas recogidas en este anteproyecto para desarrollar en los núcleos urbanos ya están ejecutadas o en marcha.

De esta manera, la Administración local cumple la normativa en la inclinación y la dirección de las farolas (se han suprimido los globos que iluminaban en cualquier orientación por otros elementos que proyectan la luz hacia el suelo y en un ángulo de 180 grados), en el tipo de lámparas que hay que utilizar o de uso preferente (a punto de completar el cambio de las tradicionales de vapor de mercurio), y en los sistemas de reducción del flujo luminoso en horarios de alumbrado restringido, y la estabilización de la tensión de alimentación, para que las instalaciones sean eficientes y permitan el uso adecuado de las mismas (prácticamente es una realidad en la ciudad).

El concejal de Mantenimiento y Alumbrado, Juan José Araújo, celebra la diligencia para adaptarse a la nueva norma, “porque recoge lo que hemos potenciado y puesto en marcha hasta la fecha”, al tiempo que valora el régimen horario de alumbrado exterior, y en el que el Consistorio establecerá la franja horaria en la que permanecerá encendido atendiendo a criterios de seguridad, y vialidad. En este sentido, los sistemas de iluminación de fachadas o infraestructuras con motivos estéticos, comerciales u ornamentales y de luminosos comerciales deberán ajustar su horario de funcionamiento desde la puesta de sol a las 23.00 horas, pudiendo prolongarse en una hora en días festivos, vísperas de festivos y viernes de todo el año o bien hasta la hora de cierre del establecimiento.
“En este apartado tenemos libertad para flexibilizar la medida porque Salamanca es una excepción por su reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad”, matiza Araújo, al tiempo que recuerda que la luz de los monumentos y edificios históricos de la capital permanece encendida en invierno hasta medianoche, y en verano hasta las 01.30 horas, mientras que la iluminación de la Plaza Mayor goza de autonomía para proyectar focos en la piedra de Villamayor hasta las 01.00 durante el año.

Fuente: tribuna.net

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