El Ayuntamiento de Valencia no envió representante oficial al Congreso Nacional de Medio Ambiente celebrado del 1 al 5 de diciembre en Madrid pese a ser patrocinador especial y estar programada la intervención de la concejala de Cambio Climático.
El Ayuntamiento de Valencia no acudió, en contra de lo anunciado, al Congreso Nacional de Medio Ambiente (Conama) celebrado la semana pasada en Madrid, lo que no impidió que se hablase de la ciudad, aunque para mal y como ejemplo de derroche e ineficiencia en el alumbrado público. Sucedió en una mesa de debate sobre contaminación lumínica en la que participaba un astrofísico del Centro Astronómico Hispano Alemán, dependiente del CSIC, quien aseguró que políticas de alumbrado como la de la alcaldesa de Valencia tiran por tierra los esfuerzos por fomentar un "cambio cultural" a favor del ahorro en farolas.
David Galadí-Enríquez, uno de los especialistas del CAHA, apuntó en declaraciones a este diario, que en Valencia "se usa el alumbrado con intensidades y finalidades no justificadas técnicamente". "Se utiliza con criterios de ornamentación y ostentación, sobre todo, desde la época de la arquitectura emblemática". Citó como ejemplo la Ciudad de las Ciencias.
Galadí-Enríquez aclaró que el caso de Valencia "es paradigmático pero no es el único" y para apartarse de posiciones partidistas dijo que "Córdoba, gobernada por la izquierda, también tiene un problema de eficiencia". "Ocurre en la mayoría de las ciudades, en especial, en los centros históricos". "Algunas calles tienen la intensidad de iluminación que se recomienda para una cancha de baloncesto".
Este experto señaló que se están aprobando normativas contra la contaminación lumínica porque decir que se está luchando contra este problema da buena imagen, pero luego no se evalúa la eficacia.
La solución pasa por que políticos y científicos aunen esfuerzos para propiciar un cambio cultural. "Nadie concibe que una fuente pueda estar tirando agua las 24 horas del día y con el alumbrado debería pasar igual". "No es cierto que mayor iluminación sea sinónimo de progreso o de más seguridad". "Una cosa es la percepción subjetiva y otra la realidad", recalcó.
Cambio de "chip" y de luminarias
Para rebajar la contaminación lumínica, el astrofísico recomendó la instalación de luminarias de bajo consumo que proyecten la luz hacia abajo y sin soluciones intermedias e ineficaces como la colocación de boinas sobre las farolas tipo globo. Cabe recordar que el servicio de alumbrado será uno de los principales beneficiarios de los 140 millones de euros que le corresponderán a Valencia del Fondo Local de Inversión.
La ausencia de representantes oficiales del Ayuntamiento de Valencia en el Conama, al que se han destinado 100.000 euros, llama la atención dado que fue la propia concejal de Cambio Climático, Mª Angels Ramón-Llin quien, a finales de noviembre, dio a conocer con todo lujo de detalles la firma de un convenio con el presidente de la Fundación Conama, Gonzalo Echagüe, que garantizaba la presencia de Valencia en este reconocido foro de medio ambiente.
En palabras de Ramón-Llin, el convenio permitiría a Valencia "exponer los avances medioambientales de la ciudad verde y azul" y le otorgaría "un estatus y protagonismo especial". La edil socialista Carmina del Río, que asistió junto con algunos técnicos al congreso, calificó de inexplicable la ausencia y apuntó que el ayuntamiento "ha perdido una oportunidad magnífica para explicar qué está haciendo contra el cambio climático y aprender de otras ciudades".
Fuente: Levante-emv
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