lunes, 12 de abril de 2010

El ayuntamiento de Cantabria (España) mejora el alumbrado para evitar emitir 12,13 toneladas de CO2

Este proyecto se financiará con fondos del Plan E y funcionará en las instalaciones lumínicas de las calles Marqués de Santillana y Juan Cacho Ruiz de Villa; en las avenidas Ansar, Fernando Arce y Julio Hauzeur, y en la Plaza San Gil, todas ellas del centro urbano, así como en la Avenida de Moneche (Ganzo), Barrio Emilio Revuelta (Caseríos) y el Parque de la Barquera.

Fuentes municipales han explicado a Efe que el proyecto prevé instalar en estas zonas 16 nuevas luminarias de 70 watios, 116 de 100 W en vez de las actuales de 150 W, y 68 de 70 W en vez de las actuales de 100 W, con lo que se obtendrá una reducción en la potencia instalada de 6,72 kilowatios.

Los cálculos de los técnicos municipales estiman que con esta mejora en la instalación se obtendrá un ahorro anual de 3.467,52 euros, ya que este alumbrado se mantiene encendido una media de 4.300 horas anuales, con un coste medio de 0,12 euros por kilowatios consumido.

Con la propuesta, se estima una reducción de la potencia eléctrica instalada en los alumbrados de estas calles desde los 24.300 Watios actualmente a los 17.480 W previstos, lo que implica una reducción de 6.720 W, equivalente al 32,67% de la potencia instalada.

Además, los técnicos estiman que la energía ahorrada anualmente por los alumbrados propuestos es de 28.896 kWh, con lo que se evitaría una emisión de 12,13 toneladas al año de CO2 a la atmósfera, ya que se considera que cada kilowatios/hora de electricidad consumida genera 0,42 kilogramos de CO2.

La memoria del proyecto explica que, en la actualidad, en los alumbrados públicos de Torrelavega hay instaladas luminarias esféricas cuya eficiencia energética no se corresponde con la tendencia promovida desde la Unión Europea, Gobierno de España y comunidad Autónoma de Cantabria.

Así, además de ser "ineficientes energéticamente", emiten parte de su flujo luminoso hacia el hemisferio superior, lo cual provoca un consumo innecesario y genera una contaminación lumínica en el entorno donde están instaladas, en especial sobre las fachadas y ventanas de las viviendas colindantes, con la consiguiente consecuencia a los vecinos.

Las luminarias esféricas están, en su mayor parte, situadas en fachadas o soportes a una altura comprendida entre los 3 y 5 metros, y emiten luz en todas las direcciones, lo que da la falsa sensación de que iluminan más de lo que realmente iluminan.

Con el desarrollo del proyecto se pretende contrarrestar el exceso en los niveles de iluminación del municipio que dan lugar a un sobre consumo y a una mayor emisión de CO2 a la atmósfera.

Además, se pretende humanizar la ciudad mediante la implantación progresiva de soluciones lumínicas que embellezcan en paisaje urbano durante el día y que iluminen de un modo justo y eficiente el paisaje nocturno, transmitiendo una sensación de seguridad y confort visual al ciudadano y minimizando la contaminación lumínica.

Feunte: http://www.abc.es/

1 comentario:

Anónimo dijo...

buen informe, la verdad que hay que tratar este tema desde todos los angulos. saludos

esteban andrada

www.estebanandrada.blogspot.com